«Una de las prioridades debe ser tener de una vez un albergue municipal para dar respuesta inmediata a situaciones de urgencia»
Hikma Mohamed Mohamed (Ceuta, 1976) nació en el seno de una familia trabajadora de 8 hermanos en la barriada de la calle Argentina, en el corazón de esa otra Ceuta a la que el PSOE quiere “devolver la dignidad”. Cursó sus primeros pasos en la educación pública en el colegio García Lorca desde donde pasó al IES Puertas del Campo. Desarrolló su actividad profesional entre 2008 y 2012 en la Unidad de Promoción y Desarrollo (UPD) de la Delegación de Gobierno. Cuatro años en los que trabajó en la gestión de los Planes de Empleo, por lo que conoce las singularidades del drama del paro en su ciudad natal. En el último Congreso regional del PSOE de Ceuta Hikma Mohamed fue elegida miembro del Comité Regional a cargo de la Secretaría de Bienestar Social.
• Pregunta.- ¿Qué objetivo se marca como secretaria de Asuntos Sociales del PSOE?
Respuesta.- Nuestro primer objetivo, el que vertebra nuestro proyecto político, es la erradicación de las desigualdades. Debemos trabajar con un objetivo primordial: que no haya ceutíes en riesgo de exclusión social. Los principios socialistas de igualdad, libertad, solidaridad y justicia social son más necesarios que nunca en Ceuta. Los 22 años de Gobierno de Vivas han convertido a Ceuta en una ciudad de dos velocidades, basta con darse un paseo por la periferia para comprobarlo a simple vista. Una mitad de los ceutíes disfruta de un nivel de vida por encima de la media, con buenos salarios y todas las comodidades; mientras la otra mitad sobrevive cada vez más cerca del abismo de la pobreza, en barriadas sin los mínimos servicios. Una brecha social y económica que se hace un poco más grande cada año que pasa y lo más doloroso es que el Gobierno del PP lo ve como lo vemos todos, pero no ha hecho nada de nada en más de dos décadas. Ceuta tiene las peores tasas de pobreza y de riesgo de exclusión social pero el Gobierno de Vivas prefiere invertir el dinero en farolas de 60.000 euros en la Gran Vía.
Nuestro objetivo, además, debe ser el distanciamiento conceptual con la idea de beneficencia que tiene la derecha en general y el Partido Popular de Ceuta en particular. Debemos tratar de forma digna a las personas que como último recurso acuden a la ayuda pública ante situaciones a veces muy difíciles. Nuestro trabajo es el último recurso para miles de personas en la Ceuta partida en dos diseñada por el Gobierno de Vivas. Debemos generar desde nuestra responsabilidad los mecanismos necesarios para acabar con la desigualdad social, tan patente en nuestra ciudad que basta un simple paseo para darse cuenta de las enormes diferencias de renta entre unas zonas de Ceuta.
P.- ¿Qué funciones tiene?
R.- Nuestra función debe ser atender a todo el que lo necesite, a todos sin excepción, se llame como se llame. Estar siempre del lado de quienes más lo necesitan. Es una tarea tan difícil como apasionante y reconfortante. Para ello hay que proponer y poner en marcha actuaciones que mejoren la vida de los ceutíes, no solo promesas, anuncios y buenas palabras que se las lleva el levante. Desde el PSOE trabajamos para fiscalizar los desastres que nos deja la política anquilosada y desigual del gobierno Vivas, y créame, son muchos los desastres con los que hemos de lidiar con un Gobierno que hace muchos años que no sale del Palacio Autonómico.
En este sentido, es muy ilustrativa la ubicación de la propia Consejería en un callejón de difícil acceso en la barriada de Hadú. Les traiciona el subconsciente, cierran los ojos tratando de no ver, de invisibilizar la pobreza creada por obra y gracia de los gobiernos de Vivas.
P.- ¿Cómo valora la gestión actual del área de Asuntos Sociales en la ciudad autónoma?
R.- ¿Gestión? Si la hubiera se podría valorar, pero es que tristemente prácticamente no existe, y la poca que hay es nefasta, a veces parece que lo hacen a regañadientes. Si fuera por el PP no habría ni Consejería de Asuntos Sociales. El Gobierno confunde servicios sociales con beneficencia. No ayuda, da limosnas. El Área de Asuntos Sociales es un desastre desde hace demasiados años. Es lenta y farragosa, no se atiende con celeridad suficiente las necesidades de los ceutíes y cuando lo hace es mal y tarde. Mira, un ejemplo claro es que por sistema se abre expediente por petición en vez de por individuo o por unidad familiar. Es una política social sin empatía que deshumaniza al ciudadano que acude en busca de ayuda, lo hace sentir culpable, lo estigmatiza y a veces parece que hasta lo desprecia.
Tenemos que acabar con la idea de que la gente que acude a Servicios Sociales lo hace en busca de una “paguita” que se ha encargado de difundir el PP durante años y a la que ahora se ha sumado Vox. Es una idea propia de privilegiados. Nadie quiere vivir de ayudas, pero esta es una ciudad con tasas de paro insoportables, muchas familias viven con un sueldo mínimo o con el salvavidas de los planes de empleo o de ayudas como el Ingreso Mínimo Vital, todo ello con dinero que, por cierto, llega del Gobierno Central, no del Gobierno de Vivas.
En este contexto el Área de Asuntos Sociales es clave y no podemos seguir con una consejera que hace tiempo que se desentendió de su trabajo. Los Servicios Sociales han evolucionado y cambiado en los últimos años. Las necesidades han crecido, más aún desde la pandemia, y los servicios no han ido en consonancia con ellos. Eso debe cambiar. Necesitamos un Gobierno con empatía que sepa adaptarse a los nuevos tiempos.
El Partido Popular sigue anclado en conceptos e ideas totalmente caducas, que no han servido para paliar las necesidades de los que peor lo pasan y en el mejor de los casos únicamente han servido para parchear puntualmente situaciones de desigualdad que hacen totalmente inviable el progreso social en Ceuta. Podemos afirmar sin temor a equivocarnos que la política de servicios sociales es otro más de los fracasos de gestión que el señor Vivas puede añadir a su curriculum.
P.- ¿Qué podría aportar el partido socialista distinto al resto de partidos?
R.- Lo primero, sensibilidad y empatía, como te decía. Y también trabajo de calle, algo que creo que es una de las grandes carencias de este Gobierno atrincherado en su despacho. Trabajamos con personas no con números. Es necesario un enfoque más humano, cercano y real a las personas que precisan de nuestra atención, atendiendo de forma individualizada las necesidades prioritarias de cada persona, hay que conseguir que el estado de bienestar, una de nuestras señas de identidad, llegue a todos los ceutíes, que nadie se quede atrás, no es admisible que consintamos como políticos o como personas que vecinos nuestros se despierten cada mañana sin saber si van a comer en ese día.
Cada caso es un mundo en sí mismo, es necesaria la atención individualizada, detrás de cada persona que acude a Servicios Sociales hay una familia que nos necesita, no podemos olvidarnos de eso. La Administración trabaja para ellos, debemos ser garantes del bienestar social de todos, no solo de unos pocos que, encima, viven como marqueses.
Además, desde el PSOE tenemos el aval de un Gobierno socialista que en los peores 8 años de la historia reciente de España, con una pandemia, una crisis económica, una guerra y hasta un volcán, ha demostrado que gobierna sin dejar a nadie atrás. Creo que es necesario que haya un Gobierno socialista también a este lado del Estrecho. Hemos demostrado que en las peores circunstancias gobernamos para todos, sin excepción.
Como no puede ser de otra manera tengo el firme compromiso del secretario general de mi partido de hacer de Asuntos Sociales una de las piedras angulares de la acción de gobierno del Partido Socialista a partir del próximo 28 de mayo, en definitiva, nuestro proyecto se basa en garantizar para todos los ceutíes que lo necesiten su derecho a unos servicios sociales en los que quede asegurada una protección social suficiente.
P.- ¿Algún proyecto que les gustaría poner en marcha?
R.- Muchos, la verdad, las necesidades son tristemente demasiadas en esta ciudad. Pero creo que una de las prioridades debe ser tener de una vez un albergue municipal para dar respuesta inmediata a situaciones de urgencia y no como ahora que se actúa con parches y soluciones temporales que terminan siendo permanentes. Además, debemos potenciar todas las áreas de asistencia social, ese debe ser nuestro eje de gobierno. Le recuerdo que casi todas las iniciativas que se llevan a cabo en esta materia proceden de la iniciativa en la Asamblea de los partidos de la oposición con el PSOE a la cabeza. De no ser así la inmensa mayoría de los programas de asistencia no existirían o su asignación presupuestaria sería tan insignificante que tendría un carácter totalmente simbólico.
P.- ¿En qué ejes se debería fundamentar la atención de asuntos sociales en Ceuta?
R.- La política social en nuestra ciudad debe replantearse, debemos ser capaces de tener una mirada global sin perder de vista los casos particulares. Tenemos que implementar actuaciones integrales, transversales, que contemplen políticas sociales, pero también de vivienda y de empleo.
Son muchas las familias que requieren de una actuación integral, necesitan herramientas que le ayuden a escapar de la pobreza. Debemos tener una mayor participación en políticas activas de empleo, reforzar la formación, siempre apoyándonos en las aportaciones que los técnicos que están sobre el terreno, que conocen bien la realidad de Ceuta, consideren necesarias. Este debe ser un trabajo de todos para que nadie se quede atrás. Queremos una ciudad que avance por igual, que ofrezca oportunidades a todos.
Pero al mismo tiempo debe ser una política social ágil, capaz de reaccionar y actuar con celeridad en esos casos que requieren una ayuda puntual. Que nadie sienta que el sistema se ha olvidado de él. Que nadie, nadie, salga de Servicios Sociales con la sensación de que no se le ha escuchado, que su caso terminará en un cajón, algo que lamentablemente ocurre muy a menudo con el Gobierno de Vivas.
P.- Ceuta es uno de los territorios de España con mayor tasa de pobreza, y uno en los que la desigualdad es más acusada, ¿Qué soluciones proponen?
R.- La igualdad es el hilo conductor de nuestro proyecto político. Nuestra prioridad. Y la única receta pasa por trabajar, trabajar y trabajar. Sin excusas y con empatía. Las soluciones pasan por formación para el empleo para todos. Pero no todos están en las mismas circunstancias ni tienen las mismas oportunidades. Debemos pensar en esos padres y madres de familia mayores de 45 años que son parados de larga duración y de los que nadie parece acordarse; en las mujeres, que son las que llenan las listas de desempleo; en los jóvenes que no pueden casi ni soñar con un empleo de futuro…
Hace falta y de forma urgente una política que impulse las viviendas públicas, algo de lo que el Gobierno de Vivas se ha desentendido completamente. Si no fuera por los Gobiernos socialistas en Ceuta no se habría construido ni una sola vivienda social en más de una década, es vergonzoso. Además, hay que trabajar para incrementar y complementar el Ingreso Mínimo de Ingreso Social (IMIS). Pero todo ha de hacerse con un proyecto transversal y una mirada global a la realidad como base de todo.
Durante los más de 20 años de Vivas en el Gobierno no se ha realizado ni tan siquiera un diagnóstico real de la situación social de Ceuta, se actúa con parches cuando ya es tarde y solo para salir del paso, sin un proyecto real. Hace falta un área de servicios sociales que trabaje, que trabaje de verdad, no solo para cubrir el expediente.
El caduco Gobierno de Vivas sólo ha servido para que Ceuta encabece las estadísticas más negativas como la de las personas en riesgo de pobreza y exclusión social. Estará conmigo en que la gravedad y la complejidad del legado del Gobierno del PP nos va a exigir un esfuerzo que sobrepasa la acción de los asuntos sociales para enmarcarla en una labor que necesitará de la implicación decidida de todo el gobierno.
P.- La desigualdad no solo es patente en los distintos niveles de riqueza, las inversiones y prestaciones que reciben las barriadas de la periferia son muchos menores que las del centro, ¿en qué medida la barriada en la que uno nace puede afectar a un nivel de vida?
R.- Pregúnteselo a un vecino del Príncipe, o de Benzú, o de Terrones o de Los Rosales o de Poblado de Regulares. Y no hace falta irse a la periferia. Basta con alejarse solo un poco de la calle Real y las diferencias saltan a la vista. Sólo con mirar al suelo y ver el pavimento o la acera por la que caminas ya sabes si estás en el centro o en una barriada. Y las diferencias no son sólo ornamentales, lo triste es que la desigualdad está en aspectos básicos que deberían estar más que garantizados, pero no es así: el alcantarillado, la iluminación, la limpieza, el asfaltado, la seguridad, las zonas verdes…
El centro de la ciudad, por donde pasea Vivas y su corte, es una ciudad bonita y moderna, a la altura de cualquier capital de provincia, pero del Morro para arriba parece que retrocedes dos décadas o que estás en un país en vías de desarrollo. El mobiliario urbano, si lo hay, es viejo; la iluminación de las calles es escasa; hay barrios en los que no hay ni aceras y nunca se han asfaltado, solo parcheado. Para muchos ceutíes usar el transporte público es un calvario, un vecino de Benzú, por ejemplo, tiene que esperar hasta dos horas para desplazarse al centro.
No hay apenas zonas verdes. Gracias al PSOE, los vecinos de los Rosales y el Príncipe tendrán un parque que vertebre y habrá espacios de ocio al aire libre, si fuera por el Gobierno de Vivas aún estarían esperando. En 22 años solo ha hecho un parque, el de Santa Catalina, y sólo ha logrado un erial y eso que ha invertido 12 millones de euros y ahora, a dos meses de las elecciones, anuncia que invertirá 4 millones más para tratar de arreglar el desastre. ¡16 millones de euros para un parque en el que no crece casi ni la hierba y encima está donde no hace falta, en la ladera del Hacho! Es una vergüenza, peor aún, es un fraude, un timo. La de cosas necesarias y urgentes que se podrían hacer con 16 millones de euros y Vivas no ha sido capaz ni de hacer un parque.
El Partido Socialista lleva años denunciando lo que cualquiera ve en una visita de diez minutos, Vivas ha construido una ciudad fracturada en dos. Para el partido popular Ceuta va de la Gran Vía a la Plaza de Azcárate, como mucho. El resto no existimos, discriminados en inversiones y prestaciones. Evidentemente eso condiciona totalmente no solo el presente, sino también el futuro de los que no tienen la inmensa fortuna de nacer en esas pocas calles privilegiadas y centro de atención de este gobierno. Está probado que salir del círculo de pobreza se hace prácticamente imposible en estas condiciones.
P.- Una de las problemáticas de la ciudad es el acceso a la vivienda. La escasez de oferta, la falta de suelo para nuevas construcciones y el alto precio de los alquileres hace imposible para muchas familias poder permitirse una vivienda digna en la que vivir. ¿Son suficientes las ayudas existentes?
R.- La falta de vivienda es uno de los problemas más urgentes de Ceuta. El precio del mercado de vivienda está condicionado por la escasez de suelo por un lado y por el inmovilismo del Gobierno de Vivas, que ha tardado 22 años en redactar y aprobar un nuevo Plan General y todavía no es una realidad. Pero es que, además, como le decía antes, el Gobierno de Vivas se ha desentendido completamente de las políticas de vivienda. Si no fuera por los Gobiernos socialistas en Ceuta no se habría construido ni una sola vivienda social en más de una década y lo poco que ha hecho Vivas en este capítulo acabó en el caso Emvicesa, un escándalo de corrupción con viviendas sociales con moneda de cambio. Es muy triste y creo que define muy bien lo que entiende el PP por política social.
Los socialistas nos comprometemos a cambiar esto de arriba a abajo, construiremos viviendas con el apoyo decidido del Gobierno socialista en Madrid, como hemos demostrado. Viviendas que den una respuesta real a las necesidades de los ceutíes, en especial para los jóvenes, con soluciones a su medida. Las últimas viviendas que se hicieron pensando en los jóvenes ni siquiera se adaptaban a la realidad, con requisitos muy difíciles de cumplir para los jóvenes ceutíes. Otra prueba más de la desconexión de este Gobierno con la realidad que le rodea.
La solución del problema de la vivienda pasa también por acuerdos entre las administraciones que el Partido Popular no ha querido abordar para la cesión de suelo militar en desuso a la ciudad para la construcción de viviendas sociales.
P.- El Ingreso Mínimo Vital llega a casi 10.000 beneficiarios en Ceuta, ¿Cómo valora esta ayuda? ¿Es suficientemente eficaz? Y, ¿sostenible en el tiempo?
R.- El Ingreso Mínimo Vital es más que una ayuda, es una prueba más de que el Gobierno de Pedro Sánchez invierte en las personas. Ceuta es uno de los dos territorios junto a Melilla con mayor porcentaje de población beneficiaria a lo largo de los dos últimos años de este programa, alrededor del 12%. En España ha llegado ya a casi 600.000 hogares, 1,6 millones de personas se benefician del Ingreso Mínimo Vital y aproximadamente el 43% son menores de edad. Solo en Ceuta son casi 10.000 los beneficiarios del programa, casi la mitad niños, que gracias a esta ayuda pueden pasar de una situación de vulnerabilidad a otra de integración plena en la sociedad. En cuanto a su sostenibilidad en el tiempo, sólo es cuestión de tener claro cuáles son las prioridades. Basta con mirar en qué malgasta el Gobierno de Vivas millones de euros. Las prioridades definen a un Gobierno.
El objetivo es que llegue a más de 15.000 ceutíes en el umbral de la pobreza y se está haciendo un esfuerzo sobre todo en difusión. Hace un mes el Ministerio de Inclusión instaló una carpa informativa en nuestra ciudad y la Seguridad Social ha incorporado a 6 trabajadores para agilizar la tramitación de los expedientes. Hasta ahora se han aprobado en la ciudad 2.541 expedientes, pero hay que seguir trabajando para que nadie quede fuera. Aprovecho ahora para animar a los ceutíes a interesarse por esta prestación económica que está ahí para ayudar a quienes lo necesitan.
Y el Ingreso Mínimo Vital es solo uno de los logros del Gobierno de Pedro Sánchez. Ahí están la subida del Salario Mínimo Interprofesional, la revalorización de las pensiones, la inversión en la sanidad pública, que aumentó en un 239% en 2022, el impuesto a las grandes fortunas, la bajada del IVA en productos femeninos, la aprobación de la equiparación de los permisos de paternidad y maternidad, la ley de eutanasia, el crecimiento de las contrataciones indefinidas… El futuro siempre da la razón a las políticas que pone en marcha el PSOE, políticas de progreso.
P.- La sociedad cada vez cuenta con más herramientas y campañas a favor de la integración de las personas con algún tipo de discapacidad, tanto en el mundo laboral, como en el ámbito general, desde el PSOE, ¿qué línea proponen para seguir trabajando en esta línea y favorecer la integración?
R.- En España, aproximadamente un 8% de la población tiene alguna discapacidad, de las que casi el 60% son mujeres. Un colectivo importante de la ciudadanía que no podemos olvidar, son ciudadanos con iguales derechos que deben formar parte de la sociedad sin que tengan que sortear barreras y dificultades. Y eso, lamentablemente, no ocurre.
Para los socialistas las personas con capacidades diferentes son una prioridad, así lo hemos demostrado hasta ahora. Ahí está la Ley de dependencia, un pilar básico del Estado de Bienestar posible gracias a un Gobierno socialista.
Lo que no debemos permitir, como ha hecho hasta ahora el Gobierno de Vivas, es dejar ese peso sobre la espalda de las familias y las asociaciones que, por cierto, reciben subvenciones mucho menores que otros colectivos de mucha menos utilidad social. No es cuestión de señalar a ninguno concreto pero los ciudadanos solo tienen que consultar los últimos presupuestos del Gobierno de Vivas y comparar lo que reciben unos y otros.
El compromiso del PSOE es avanzar en un modelo de convivencia que logre eliminar las barreras que dificultan a las personas con discapacidad el acceso a las mismas oportunidades para su plena integración. Sin dejar nunca a nadie atrás. Cuando hablamos de igualdad nos referimos también a aspectos como estos. Igualdad para todos independientemente de sus capacidades.
P- Es indudable, por la situación geográfica de Ceuta, que la inmigración ilegal es un elemento al que la ciudad autónoma siempre va a tener que hacer frente. Con la crisis de mayo, el Ejecutivo actual tuvo que habilitar los recursos extraordinarios de las naves del Tarajal que actualmente ya no están disponibles. ¿Cómo enfocan desde el PSOE está cuestión? ¿Cómo prepararían a Ceuta para que en caso de volver a darse una situación similar se pudiera atender a todas las personas que se requiriese?
R.- En primer lugar, creo que gracias al Gobierno de Pedro Sánchez el contexto ha cambiado mucho desde mayo de 2021, las relaciones con Marruecos son otras muy distintas. En la Moncloa no hay ahora un presidente que se esconde, como Mariano Rajoy, o uno que nos lleva a la guerra. Como José María Aznar. Ahora tenemos, gracias a Dios, un presidente que da la cara y afronta los problemas, un presidente que no se esconde y no se amilana como los del PP y viene a Ceuta cuando más lo necesitan los ceutíes. De hecho, desde que tengo memoria solo han venido dos presidentes en visita oficial a Ceuta y los dos eran del PSOE, José Luis Rodriguez Zapatero y Pedro Sánchez.
Pero entiendo su pregunta, la situación geográfica y geopolítica de Ceuta es la que es y somos y hemos sido siempre zona de paso entre dos continentes a lo largo de la historia. Siempre hay que estar preparados y ahí entra una infraestructura que le comenté antes y que creo que es muy necesaria: El albergue es indispensable para dar respuesta a estas situaciones.
En cualquier caso, además, la inmigración nunca dejará de ser un capítulo al que prestar mucha atención en Ceuta. Para el PSOE es muy importante reforzar la atención educativa, priorizando las aulas temporales de adaptación lingüística, con especial atención a los menores no acompañados y las mujeres migrantes, pero siempre sin olvidar que la inmigración no es solo un problema de Ceuta, sino de toda España y de toda la Unión Europea. En este capítulo debemos trabajar de forma cooperativa con el Estado y la UE.